Esta Navidad todo lo que regalé lo hice con mis propias manos.
Una porque tenía tiempo, pero principalmente porque en cada presente di vuelta todo mi amor por cada una de estas personas.

Portalápices

Luis Felipe, mi sobrino de 6 años recibió un portalápices que se enrolla y se guarda amarradito.


Los Novios

A mi hijo y su polola linda les hice este cuadrito que los representa a cada uno....


¿Se parecen un poco no?



La cocina en miniatura

Una de las más emocionadas fue mi mamá, a la que regalé una miniatura de su propia cocina.
Es cierto que me faltaron muchos detalles pero en esencia es idéntica a la original.



Amigurumi Luke Chueh

Mi sobrino de 14 años recibió el más siniestro de todos, un amigurumi (tejido a crochet) de un macabro conejo sangriento con su cabeza en la mano.
Quedó felíz.




Bolso Tilda

La primorosa hermana Valentina recibió su bolso Tilda.



El Principito

A mi hermano Gonzalo le hice este muñeco de El Principito con unos moldes que encontré en una revista.
Este fue un regalo muy especial.



Individuales Shabby chic

Fue para mi hermana Gloria, uno de los que más me costó hacer, principalmente porque van cosidos y bordados a mano en técnica de patchwork (que en mi vida había hecho).
Es un set de 6 individuales más un cubre termo.
Las orillas de flores hacen juego con los tapices de su comedor.
Le pedí retazos a ella misma sin decirle para qué los quería.
Y le di la sorpresa.




Para mi la Navidad es amor, amor y magia.
 Independiente de que sí estoy de acuerdo en hacer algunos gastos especialmente para los más pequeñitos, siento que regalar detalles hechos por uno mismo a los que se ama tiene un valor distinto.
Eso pienso.

Hace algunos años atrás se me ocurrió que podía tener un pesebre distinto, algo único y con la satisfacción de hacerlo con las propias manos.
Quería algo sencillo y que pudiera hacer con todos esos materiales reciclados que tanto abundan  en mi taller.
Entonces se me ocurrió:
Unos conos de cartón
Telas de todos los tipos y colores
Miles de pequeños deshechos de abalorios, aros en desuso, broches, botones, cadenas,
lanas y pieles para el pelo
y cuanto hallara que pudiera serme útil.


He hecho pesebres grandes, digamos de unos 45 cms cada muñeco y pesebres pequeños, de unos 8 cms.
Corto los 12 conos correspondientes a los 8 personajes y los forro con las telas de acuerdo a sus roles.
María, José y los pastores los visto con tonos crudos y telas naturales , arpilleras o algodón.
Los Magos y el ángel lucen telas brillantes y de colores o diseños maravillosos.
Los brazos los corto en algodón y los relleno, luego les pongo las mangas de la misma tela del cuerpo.
Las cabezas son de soft.
Los pelos con lanas, pieles o pelo de muñeca
María, José y los pastores llevan mantos en la cabeza
Los Reyes turbantes adornados con brillantitos, perlas o pequeños diamantes...
Todo pegado con silicona caliente.

Como buenos Reyes no deben ir sin sus capas y coronas y por supuesto...los regalos al niño Dios.
(nadie notará que el oro es un adorno del árbol de navidad, que el incienzo son 3 aros pegados o que la mirra viene en un pequeño saquito de arpillera)



Los pastores llevan encima de sus túnicas unos largos chalecos sin mangas en lindos tonos y un palito en cada mano.



María y José en su sencillez contemplan al que ha nacido.
Para agregar más efectos puse pajita en el piso y una tela azul con estrellas para el fondo de la escena.
Este pesebre está en mi casa.



Este otro está en casa de mi hermana Glo...



Y este otro viajó de Santiago a Quilpué, de Quilpué a Barcelona y de Barcelona a Munich a los brazoos de mi muy querida amiga Pancha.



La sagrada familia para la puerta como corona de avdiento se me ocurrió después de hacer los pesebres, me quedaron hechas algunas cabecitas de soft y telas y la pensé.
Nada difícil, mi marido me cortó un círculo de madera al que puse las tres caritas en el centro y adorné con guirnaldas, flores, canelas, piñas y otras cosas .

Quedó muy bella y en Navidad son los primeros en saludar a los visitantes que llegan a La Casa del Castor.